Partiendo desde Arica, inicia tu viaje en la mañana por el Valle de Azapa, la visita a su museo y a zonas de valor arqueológico, como los geoglifos de La Tropilla y el Cerro Sagrado. En la ruta hacia el interior encontrarás Poconchile, famoso por su cementerio y la iglesia colonial de San Gerónimo. Luego está el mirador de Boca Negra, desde donde se ve el Valle de Lluta, y a más de 2.000 metros siguen la cuesta del Águila y la quebrada de Cardones, territorio del cactus candelabro, especie que domina la zona con su tamaño y hermosas formas. Hay otros miradores en el camino, como el de Copaquilla. Antes de llegar a Putre, visita el tambo de Zapahuira y el pueblo de Socoroma.
Al día siguiente podrás partir hacia al Lago Chungará en el Parque Nacional Lauca. Podrás visitar termas como las de Jurasi, bofedales cercanos a la Laguna de Cotacotani, como los de Las Cuevas y Chucuyo, donde hay talleres de tejido en lana de alpaca, y el pueblo de Parinacota, antes de llegar al Lago Chungará.
Cada zona de esta región está marcada por la huella indígena; es el alma de este territorio. Hay rutas de quebradas rocosas con muestras de pinturas rupestres y en la pampa aparecen geoglifos y zonas de entierros. En estas latitudes mandan la Pachamama y el Inti.
En la ruta desde Arica hasta el Lago Chungará, no dejes de visitar la zona de Alto Ramírez, donde hay lomas con geoglifos y pinturas como el cerro Sombrero y La Tropilla, y lugares sagrados como la quebrada de Las Llosyas y la zona de los túmulos funerarios.
Por el mismo valle más adelante, también se encuentra el pucará de San Lorenzo, una fortificación en escalera que defendió a los primeros habitantes del valle y que data del siglo XII.